MERLUZA CON ALMEJAS EN SALSA VERDE

INGREDIENTES.- (Para 2 personas).- 450g, de merluza en un filete limpio sin espinas, 1/4 de almejas, 4-5 dientes de ajo, 2 cucharadas de perejil picado, un poco de harina, 1 vaso de agua, no muy lleno, sal y aceite de oliva virgen extra.

MODO DE HACER.- Cortar el filete a la mitad, para obtener las dos raciones.

Enjuagar y dejar escurrir. Las almejas ponerlas en agua y sal 1 o 2 horas.

Esto es para que pierdan la arena que puedan tener. Enjuagar y dejar escurrir.

Pelar y picar los ajos. Reservar. Picar el perejil. Reservar.

De harina se necesitará 1 cucharadita.

 Poner en la cazuela o sartén en la que se va a cocinar un chorreón de aceite.

Ya sabéis, si es para "DIETA", cuidar no se os vaya la mano con éste.

Acercar al fuego y cuando esté caliente, incorporar el ajo.

Al empezar a dorarse, añadir la mitad del perejil y las almejas.

Mezclar y añadir la cucharadita de harina y dorar un poco.

Incorporar el agua. Al abrirse las almejas, añadir la merluza ligeramente sazonada.

 

Con la piel hacia arriba. Tapar y dejar cocer unos 3-4 minutos.

Dar vuelta a la merluza, mover la cazuela para que ligue la salsa.

 

Añadir el resto de perejil, mover de nuevo y tapar. Cocer otros 3-4 minutos.

Pasado éste, movemos de nuevo, hasta que ligue bien la salsa. Solo falta servir.

Al hacerlo, se le puede añadir un poco más de perejil encima de la merluza.

Y...listo el plato. BUENÍSIMO... BUENÍSIMO...

El otro día lo hice para 4 personas. La receta estupenda de proporciones.

El perejil, no lo doblé, puse solo 3 cuchaditas.

La merluza era fantástica y las almejas igual.

Rico, rico. Os pongo algunas fotos.

 









NOTA.- Ésta receta es muy fácil, ya lo veis.

Sale muy rica. Y si no es para "DIETA", pues un poquito más de aceite.

La salsa se trabará un poco más. Estaba... rico, rico.

A la Yaya le gustaba mucho. Era un poco "gatita". 

Le encantaba el pescado, había que verla comerlo... ¡¡Lo que disfrutaba!!.

No había uno que no le gustase... Al Yayo, éste le gustaba también.

No había espinas y eso era muy importante para él.

No le gustaba mucho el pescado por eso. Las espinas...

Ya me diréis alguna vez si lo hacéis.

¡¡Menuda pinta tiene el "pescadito"..!!